Las empresas familiares son de extrema importancia en la economía española, aunque hay datos que prueban que muy pocas sobreviven generación tras generación. ¿Sabías que el 90% de empresas españolas son familiares? La mediación en las empresas familiares es de lo más útil, ya que se intenta preservar la buena relación de los familiares que la integran, permitiendo así dar continuidad a largo plazo a este tipo de empresas.
De cada diez empresas, tres sobreviven al primer cambio de generación y solo una pasa el tercer cambio. Para que un conflicto familiar en una empresa se resuelva, es crucial asumir que existe. También es muy importante que cada parte sea consciente y reconozca sus propios errores para así conseguir el éxito de la mediación.
Respecto al proceso de mediación en empresas familiares, con carácter general, suele ser el siguiente:
En primer lugar, se elige a un mediador que esté especializado en conflictos familiares. Este mediador debe ser imparcial y neutral. Es muy importante que el mediador realice una investigación para tener un conocimiento profundo sobre la empresa y la familia que la dirige.
En segundo lugar, el mediador debe reunirse con cada miembro de la familia para conocer cuál es la situación del conflicto, e identificar el problema. Una vez se ha entendido el contexto, el mediador facilita reuniones para discutir y poder llegar a un punto en común.
El mediador se centrará en que se instale una comunicación efectiva, para ayudar a los miembros de la organización familiar a entender los distintos puntos de vista de cada una de las partes, planteando varias opciones para resolver el problema y conseguir el objetivo que se persigue con la medición, encontrar una solución que acepte y beneficie a ambas partes.
Una vez que se ha llegado a un acuerdo, el mediador redactará un documento en el que se detallen todos los puntos abordados y la solución acordada. Ten en cuenta que, tras el proceso de mediación, de ser necesario, se establecerá alguna sesión de mediación preventiva para que la empresa familiar sigua creciendo con éxito, y evitar de nuevo errores en la comunicación que deriven en un conflicto familiar.
La historia oscura de Gucci
Gucci siempre ha sido una empresa de gran reconocimiento mundial, pero tuvo una época oscura provocada por la mala gestión de la empresa familiar que la llevo a la quiebra de no ser por la adquisición de la empresa por una sociedad de inversiones.
La empresa, que fue fundada en 1921 por Guccio Gucci en Florencia, se convirtió en un icono de la moda internacional. Sin embargo, tras su expansión internacional y la incorporación de los tres hijos de Gucci en la gestión empresarial, a finales de la década de 1970 y principios de la década de 1980, la marca Gucci enfrentó problemas familiares y conflictos internos, provocando una disminución en la calidad de los productos y una pérdida de prestigio de la marca.
Gracias a la compra continuada de acciones por la empresa inversora Investcorp, en 1988, la familia Gucci perdió el control de la empresa, y fue adquirida en su totalidad por el grupo de inversión Investcorp, mientras sus hermanos continuaban enfrentados.
El renacimiento de la empresa se produjo en 1994 bajo la dirección de Tom Ford, nombrado director creativo de Gucci, y su influencia revitalizó la marca. Hoy, Gucci sigue siendo una de las principales marcas de moda a nivel mundial.
Los problemas de comunicación en las empresas familiares, pueden llevar a una gran empresa a la quiebra. Dada la relevancia de este tipo de empresas en la economía española, generando casi el 70% de empleo, y aportando cerca del 60% del PIB, es fundamental acudir a un mediador para resolver los problemas familiares en el seno de la organización empresarial y marcar la diferencia entre la quiebra y el éxito.
CEO de Ecualis y Mediador laboral, inscrito en el Registro de Mediadores del Ministerio de Justicia, con más de 25 años de experiencia en el asesoramiento de pymes y grandes empresas. Miembro de la Asociación Nacional de Laboralistas (ASNALA)